Se ha puesto de moda en plena
campaña electoral el debate sobre la eutanasia, cuestión que como el aborto
genera un intenso debate entre un personal harto sensible con asuntos de
controvertida naturaleza. Al margen de que esto de la muerte más o menos dulce no tiene mucho recorrido y que tras los comicios quedará sepultado en el olvido, no dejan de tener su gracia
algunas cuestiones que rodean el caso.
Así, se ha sabido que el hombre
que facilitó el tránsito a su esposa enferma avisó a la Sexta para que
inmortalizase el momento antes de que llegase la policía, y que unos años antes,
haciendo gala de una notoria trayectoria izquierdista, había firmado un
manifiesto pidiendo la libertad de Arnaldo Otegui, un tipo que perteneció a una
banda especialista en mandar al otro barrio a personas sanas y con toda una
vida por delante. Más cosas irán saliendo mientras el sujeto, imputado con desgana por el juez y exaltado por el Estado de Bienestar, se pasea por las
televisiones para solaz de tertulianos y espectadores. Aunque el debate es tan
sencillo que se resume en una sola pregunta: ¿cómo vamos a tener libertad para
morir si no tenemos libertad para testar?
2 comentarios:
así que el sujeto es un admirador de terroristas etarras... a mí me dio en la nariz, ahora es fácil decirlo, la verdad, que el asunto olía a campaña electoral pactada... a los cinco minutos de salir las imágenes, anuncio de sánchez: "indultaré a ese tipo"... si repite sánchez, se va a pasar media legislatura indultando...
Otra muy buena del sujeto: como era de esperar, el tema ha pasado a un juzgado de violencia sobre la mujer, lo que ha provocado, además del estupor de los medios, siempre tan poco formados, que el sujeto haya dicho indignado: "cómo me hacen esta a mí, que además soy feminista". Es feminista: lo tiene todo.
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