El Régimen del 78 les desea un Feliz Año 2017 y salud para seguir pagando impuestos. Un servidor les desea la misma felicidad y mejor salud, y sin ningún ánimo de lucro, porque sí.
sábado, 31 de diciembre de 2016
miércoles, 28 de diciembre de 2016
Santos Inocentes
Puede parecer una inocentada, pero
no tiene pinta de serlo; ministro nuevo, nuevas medidas. Y no de gracia, precisamente Aquel padre que sea conductor de un
vehículo a motor no solo deberá sortear, si puede, los controles de alcoholemia
que graciosamente le pueda ofrecer la DGT sino que además deberá rezar para que su hijo menor de edad-ya veremos si no lo
alargan más allá de la mayoría de edad en caso de convivencia con los padres-no
dé positivo por empinar el codo. En ese caso, multa al progenitor: que el
multado sea el progenitor A o B, o los dos, ya se verá. Y también qué ocurre
con los padres divorciados, si debe responder el progenitor no custodio del
menor, porque alguna culpa tendrá en tamaña desgracia.
Explica también la ministra al presentar su proyecto, quizá
para suavizar la dureza de la medida y que no cunda el pánico, que las multas serán impuestas a todos aquellos padres que no
asistan a los cursos de sensibilización para reorientar al niño borrachín. No
se habla de si es excusa no acudir por pura imposibilidad física, por no gozar del don
de la ubicuidad: ¿y si el padre o la madre no acuden por coincidencia en
asistir a un curso para recuperar los puntos perdidos del carnet de conducir
por ir bebidos al volante? Una inocentada, sin duda.
miércoles, 21 de diciembre de 2016
Editoriales
Lo bueno de un editorial es que siempre diluye en la sombra al subnormal que lo escribe. Tras el atentado de Berlín, y confirmada una autoría que las torpes autoridades alemanas se negaban a reconocer, estaba claro quién sería el mayor culpable de la matanza, pero sobre todo quién obtendría rédito de ello. Es la eterna historia del tonto, el dedo y la luna, algo para lo que el panfleto El Mundo está especialmente dotado, independientemente del director de turno que lleve los tirantes de la cosa. Tópicos y lugares comunes: la ultraderecha, la xenofobia, el miedo, perseguidos por la guerra, acostumbrarse a vivir con el terror, no confundir conceptos, no hay choque de civilizaciones...Se presume que por falta de espacio, o porque el lerdo que lo escribía se tuvo que ir al baño de manera urgente, no aparecen en esa deposición Trump o Putin.
Resulta cansino tener que glosar la estupidez de la prensa patria pero no hay más remedio. Así al menos, cuando los barbudos de Alá nos manden al infierno que quizá tenemos ganado, bien podremos que decir que nosotros no éramos como ellos. Como nuestros juntaletras, obviamente.
lunes, 19 de diciembre de 2016
Odia el delito
Al igual que El Almendro,
Valentín Lasarte vuelve a casa por Navidad. Ahí
lo tienen, de aperitivo por la ciudad donde cometió sus fechorías luciendo una
prominente barriga que es metáfora de la llamada Vía Nanclares. Buena vida y
buenos alimentos, reinserción, en fin, haciendo aquello que hace la gente
normal y sin ser molestado, lo que debe de llenar de honda satisfacción al
legislador penitenciario, que busca siempre la función resocializadora de las
penas, y a ser posible en tu pueblo. Odia el delito y compadece al que no tiene para pintxos.
viernes, 16 de diciembre de 2016
El nuevo legislador
En el foro siempre ha existido una
máxima, que como las buenas máximas no está escrita, que afirma que cuanto
más breve sea el nombre o denominación de una ley, mejor será está y más
respeto causará. Grandes leyes de antaño como el Código Civil, el Código Penal, las Leyes
de Enjuiciamiento Civil y Criminal, o la misma Ley Hipotecaria así lo avalan.
Pero los tiempos han cambiado y ahora las leyes aglutinan la estupidez de los
políticos y la incompetencia de los técnicos, presuntos expertos estos últimos
que por desgracia no son el legislador decimonónico, ni en el fondo ni mucho
menos en la forma.
Buen ejemplo de esta decadencia intolerable e intolerante es el proyecto de Ley sobre la Igualdad de Trato y la Protección contra las Acciones de Incitación al Odio, la Discriminación y la Intolerancia, bodrio que ha
perpetrado el gobierno madrileño de Doña Cifuentes, política al alza cuya
toxicidad sólo es comparable a su demagogia. Es fácil imaginar que con ese
nombre nada bueno espera a los que se muevan por la Comunidad de Madrid y
frecuenten redes sociales. Guerra sin cuartel a la homofobia y la xenofobia y
cualquier cosa que se parezca y para la que habrá siempre una tendencia
favorable-in dubio contra reo- a meter en el mismo saco.
Dado que conductas de este tipo
ya están recogidas en la legislación penal en ese cajón de sastre que son los
delitos de odio y que tanto celo provoca en algunos fiscales, se pregunta uno qué
mueve a los muñidores de este proyecto de ley para hacer las veces del Gran
Hermano en paralelo al legislador penal, otro que ya tiene su delito y al que algún día habrá que juzgar. Sólo una
respuesta cabe: el odio, sin duda, a la libertad.
martes, 13 de diciembre de 2016
Dame algo
Todo parece indicar, tal y como
no se cansa de afirmar Don Mariano Rajoy, que España va por el buen camino, por
la senda de las reformas que se necesitan, y para eso, con el beneplácito del
siempre solícito pero ninguneado Rivera, tiene un segundo mandato. Así que al
rebufo de esas medidas socialistas-no hay techo para que gasten los taifas-que
nos llevan por el consenso constitucional, y que gustosamente paga el vulgo con
sus impuestos, nos encontramos con medidas como ésta de la autonomía valenciana que ofrecen una renta universal garantizada sine die y que nos reconcilian con
la solidaridad y el amor fraterno. Que los beneficiarios sean españoles o
extranjeros, con o sin papeles estos últimos, tanto da: será por dinero.
La promotora de la medida nos
cuenta que han sido muy valientes, obviedad que da vergüenza glosar, pues
siempre se es valiente y osado cuando se dispara con pólvora del Rey. Sobra
decir que la medida, al menos en esa región, deja un poco en cueros la propuesta
estrella de la ministra Báñez, otro sujeto que lleva toda la vida enganchada a
una renta universal garantizada, para conciliar la vida familiar y laboral
imponiendo límites a los horarios de la jornada laboral, pues quién va a tener
ganas de trabajar con una paguita en esas condiciones. Larga vida, pues, al
contribuyente, quien como decía Reagan es una persona que trabaja para el Estado
pero sin haber hecho oposiciones a funcionario. Como Báñez, o como Oltra.
miércoles, 7 de diciembre de 2016
Trabalenguas
Se puede leer en un diario de Barcelona
que el gobierno tendrá un gesto con la lengua catalana. Llegados a estas alturas
de la película, con Millo como delegado de la cosa en el Ostfront, se pregunta uno qué más se puede hacer desde el Estado-el
gobierno es su brazo ejecutor-para con esa lengua. Proscrito el
castellano de cualquier administración pública en Cataluña y desterrado de la
enseñanza, amén de las multas en la rotulación de negocios, la posibilidad de
ese gesto se antoja metafísicamente imposible, máxime cuando el blindaje de la
lengua de Pompeyo Fabra está garantizado por la aplicación práctica de
sentencias y resoluciones judiciales, que no es otra que incumplirlas ante el
dontancredismo del gobierno de turno.
Así pues, el único gesto que ya cabría
con la lengua catalana, salvo que sea dar latigazos a los que usen el
castellano en la calle, sería que Rajoy recitase en público el Setze jutges sin lanzar muchos escupitajos
al personal.
viernes, 2 de diciembre de 2016
Déjà vu
Cuando por fin se pudo
desatascar la situación-maravillosa para el contribuyente e idílica para el ciudadano-de gobierno en
funciones, se nos dijo que llegaba un tiempo de consenso, ya que un gobierno
popular sin mayoría absoluta debía pactar todas aquellas reformas de calado. Ya
estaba ahí, siempre al quite, Rivera con su ofrecimiento para lo que hiciese falta, que no era
otra cosa, como buen socialdemócrata, que alguna subida de impuestos para
alguna ley de corto recorrido. Pero sobre todo había que pactar con los
socialistas, que para algo habían sacrificado a Sánchez en el altar del pacto
del 78 tras unos eructos de Felipe González. Así que ya se habla de dar más
dinero a los taifas autonómicos y subir el salario mínimo, que como sabe todo
buen liberal es medida que garantiza más paro. Por no hablar de una subida generalizada de impuestos que hará que la gente no tire de combinados alcohólicos con bebidas azucaradas.
Como todo es un espantoso déjà vu,
recordemos que hace cinco años ya se subieron impuestos cuando en campaña electoral
se prometió bajarlos, bien podemos decir que, fruto del consenso extractivo de
las élites del funcionariado, ha nacido un nuevo partido, el Partido Socialista
Popular.
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