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martes, 21 de febrero de 2017

España invertebrada



Como decía Camus, la estupidez insiste siempre, una y otra vez, de ahí que Pedro Sánchez vuelva por sus fueros-y nunca mejor dicho-con lo de España como nación de naciones. Modificar el artículo 2 de la Constitución en un sentido que sólo él sabe pero que en la práctica se traduce-vuelta a la casilla de salida-en que Cataluña es una nación. Conclusión que matiza la plurinacionalidad con la que el socialista se llena la boca para dejarla en binacionalidad: España y Cataluña, pues el País Vasco son territorios históricos y Navarra, como lo fue el campo de Osasuna, un Reyno. El resto quedan como estaban, al fin y al cabo, y una vez muerta Castilla, nunca aspiraron a otra cosa que el acomodo en el presupuesto.

Casi un siglo después de la publicación de España invertebrada, Sánchez insiste, aunque para agravarlos, en los males que diagnosticó Ortega, dejando más latente y atinado que nunca el lamento del filósofo: hoy no hay hombres en España. Cierto: sólo hay estúpidos.

7 comentarios:

tolerancio dijo...


apenas hace unos meses dio un mitin con un enorme banderón de españa en la pantalla... ha caído rendido ante el sensual movimiento de caderas de iceta... hipnotizado por los batimanes de tan bella odalisca...

Reinhard dijo...

No me resisto a enlazar al baboso que faltaba en la orgía de la infanta.

Ansón.

Fuga dijo...

Bueno Reinhard...por lo menos uno se felicita por los comentarios de los lectores que dejan a Ansón en su condición de pobre hombre que siempre ha sido.

Estos fulanos, que en algún momento alardeaban de factotums, ya no engañan a nadie.

Aitor Mento dijo...

Al contrario de lo que pudimos pensar, no fue finalmente ZP el que vengaría al Frente Popular, sino otro gicho del PSOE más tonto aún si cabe. Aunque también más sediento de poltrona.

Reinhard dijo...

Fuga, ¿cómo era aquello de cuando un tipo no estaba muy cuerdo? ¿Incapacitación?

Anónimo dijo...

En caso de Ansón se llama cortesano. De eso en Madrid a puñaos.

Tiene su sarcasmo que el personaje difamase a los conjurados republicanos -sic- y luego una de sus víctimas lo rescatase para El Mundo, PJ. Tal vez sea el acta más despiadada sobre la inanidad del fulano. Y que él aceptase sea el ejemplo de falta de dignidad que le retrata.

PJ se debió echar unas risas con aquel gesto...

Reinhard dijo...

Anónimo, cada vez que veo o leo a Ansón me acuerdo del padre del cazador de elefantes, Estoril y aquel exilio tan duro que impuso Franco a la familia imperial. Qué tiempos.