Marca la X en tu declaración
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De las catástrofes siempre queda la nostalgia por las naderías de la víspera
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7 comentarios:
Hemos de suponer que con estas monjas metidas en política se acabó el problema económico de sus Conventos. Tienen buenos maestros que podrán darles un excelente training en el arte de los tantos por ciento.
Si a ello le añadimos el tufo podemita de nuestro querido Papa argentino, lo de la X en la casilla de la iglesia va a quedar como que muy cuestionado. Vamos, como que no.
Entonemos el: Miserere nobis Domine secundum magnam misericordiam tuam.
La monja tal es un clásico de nuestra iglesia, no hay novela decimonónica, empezando por Galdós, que no tenga a una chulapa enfundada en sus hábitos recordándole a cualquier burgués puteado por el Estado extractivo que es un pecador por mimar los cuatro chavos remanentes de su esfuerzo que no le sustraen los demás dioses laicos para pegarse la gran vida.
Es una forma, otra, de orgasmo de sustitución.
A falta de nabos, la íntima felicidad de saberse la más querida del todopoderoso por ir por la vida señalando a los demás…
detrás de la cruz anda el diablo... no quiero decir que la caram sea satanista... pero caram y forcades, su alter ego aborigen, me hacen pensar en el famoso ensayo de eliade "lo sagrado y lo profano" de amena y edificante lectura... donde los términos de la oposición o del binomio, con una carga significativa excesiva, terminan por acercarse a un espacio límbico, fronterizo, y ahí están, que es difícil distinguir entre uno y otro...
pero qué hacer con la casilla... ¿se puede uno declarar objetor?... porque si no marcas la casilla de la iglesia, vete tú a saber que vaya el dichoso 0'7 a una ong, y las hay para todos los gustos... o a otra confesión y acaben tus cincuenta céntimos en las arcas del estado islámico o en catalunya acció, de santiago espot... qué dilema...
Ayer la vi brevemente zapeando afeando a un tipo joven de éxito por resistirse a prodigar sus bienes ‘hasta el dolor’…no le bastaba la generosidad, exigía inmolación económica.
El joven parecía resistirse a ese gratuito masoquismo y balbuceaba, algo acomplejado ante el empuje inquisitorial de la virtuosa, que le había costado mucho esfuerzo llegar ahí.
Luego le dio el coñazo a un chino al que pilló jugando al golf...el tipo se descojonaba.
Fuga, ¿Nabos? ¿Monjas? Ay,company.
Tolerancio, en mi caso, no marco ninguna, pues es igual el asco que experimento por ambos destinos. La verdadera objeción es largarse a Phuket.
tomo nota, don reinhard... se trata de no marcar casilla alguna... queda patente mi supina ignorancia en materia fiscal...
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