Advierte Mas al fiscal jefe de Cataluña que hay que casar bien legalidad y legitimidad, lo que se traduce en que hay que buscar alguna clase apaño para igualar, al menos, ambos conceptos, pues una cosa es la ley vigente, que casi nadie respeta, y otra la voluntad de un pueblo, aunque esta apenas alcance la cuarta parte, si llega, del censo electoral. Circunloquios para decir que la ley no sirve y que hay que cambiarla mediante procesos poco ortodoxos.
El debate entre lo legal y lo legítimo es ya viejo y constante y forma parte de los peligros de poner en manos de los políticos la gestión de negocios ajenos. ¿Es legal que la vicepresidenta del gobierno regale más de cuatro millones de euros para salvar al Liceo de la quiebra? Será legal, tal vez, pero no parece muy legítimo que un señor de Cuenca deba contribuir con sus impuestos en la salvación de un chiringuito patrimonio de la burguesía catalana. ¿Es legal que Rajoy se presente en Barcelona para defender la unidad de España y que lo haga en un acto de partido? Lo es, pero más legítimo hubiese sido que la charla la soltase como jefe del gobierno en un acto para todos los públicos, incluidos menores de edad.
Y así hasta el infinito, hasta Podemos, que no niega que la deuda española sea legal pero dice que se debe auditar, dando así por hecho que es ilegítima para sus tenedores. Ante este despropósito de casar conceptos, y habida cuenta de que somos los únicos que pagan el convite, solamente nos queda hacer un buen maridaje con la legítima defensa.
El debate entre lo legal y lo legítimo es ya viejo y constante y forma parte de los peligros de poner en manos de los políticos la gestión de negocios ajenos. ¿Es legal que la vicepresidenta del gobierno regale más de cuatro millones de euros para salvar al Liceo de la quiebra? Será legal, tal vez, pero no parece muy legítimo que un señor de Cuenca deba contribuir con sus impuestos en la salvación de un chiringuito patrimonio de la burguesía catalana. ¿Es legal que Rajoy se presente en Barcelona para defender la unidad de España y que lo haga en un acto de partido? Lo es, pero más legítimo hubiese sido que la charla la soltase como jefe del gobierno en un acto para todos los públicos, incluidos menores de edad.
Y así hasta el infinito, hasta Podemos, que no niega que la deuda española sea legal pero dice que se debe auditar, dando así por hecho que es ilegítima para sus tenedores. Ante este despropósito de casar conceptos, y habida cuenta de que somos los únicos que pagan el convite, solamente nos queda hacer un buen maridaje con la legítima defensa.
5 comentarios:
así, a la brava, con cámaras y micrófonos delante, a calzón quitado... sin disimulo... nada de una llamadita o una cita discreta... "mira, a ver qué me vas a hacer con las querellas... que tienes familia, hombre, no te compliques"...
miles de muertos y abrazo de Vergara al canto. Es una vieja historia esa del apaño y la legalidad.
El país apesta...
¿Que si apesta esto? Mira Alonso, ministro de un ministerio cuyas competencias son de los taifas.
Ayer escuché a un tertuliano decir que Alonso acometería un plan integral de defensa de la familia. Que Dios nos ampare...
Estoy por hacerme una camiseta con la sonriente cara del pequeño Nicolás: soy fan, hoy menos que mañana.
Mírenlo ustedes por el lado positivo : podía haber sido peor, y que Mariano hubiera puesto en el cargo a Javier Arenas.
Además, Alonso, es abogado, pero no del Estado. Ya es un avance.
Queda legislatura, Don Aitor: hay tiempo para Arenas.
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