Expulsado ya de la carrera judicial y sin el peso de una toga manchada por la mierda del camino, llegó Baltasar a Buenos Aires a darse un baño de masas en un lugar de tamaño prestigio como el Congreso argentino, teatro donde constantemente se escenifica esa tragicomedia llamada peronismo y a la que Expaña parece encaminarse con paso firme. A modo de claque, y fiel a su querencia por el respaldo de momias al estilo Villarejo, gozaba el reo de la compañía de la tal Bonafini, conocida activista proetarra, lo que evidencia una vez más que desde la superioridad moral de la izquierda perfectamente se puede estar en misa y repicando. ¿Y el Faisán, Baltasar?, preguntaba esta Vieja´l Visillo argentina. Como siempre, Hebe: otra vez campeón de Europa.
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5 comentarios:
Dai prisa, Balta, dai prisa. Ché.
¿josé antonio martín pallín arremete contra don luciano varela castro?
artículo "madres erradas", de martín prieto, el mundo año 2000
Si alguien se preguntaba qué diferencia hay entre la basura y la mierda, tiene la respuesta en ese balcón: ninguna.
Hay que ver como gusta a ciertos elementos rebañarse en el desprestigio y la infamia. Por lo menos, esto ha sido en el otro lado del charco, y en Argentina, espero que las mareas atlánticas puedan llevarse tanto chapapote moral.
Que sea Argentina no es casual: quizá sea el único país del mundo, además de España, donde este sujeto puede recibir un homenaje, si bien allí lo recibe con carácter institucional. Cosas del peronismo.
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