Ha tenido mala suerte el magistrado Enrique López: tanto batallar para llegar al Tribunal Constitucional, demostrando que la judicatura es un mercadillo al servicio de los políticos, y se ve obligado a presentar su dimisión por la comisión de un delito contra la seguridad del tráfico en la modalidad de empinar el codo, saltándose un semáforo que era todo un presagio luminoso: aquí se detiene tu carrera ¿No gozaban sus excelentísimos señores de coche oficial, o desapareció con los recortes? Gafe que se ve incrementado porque esa dimisión, gesto nada habitual en el solar patrio, se presentó el mismo día que el Rey también dimitía de lo suyo: todo un eclipse que deja al ropón en la más absoluta soledad, la misma que acompaña a cientos de personas en el mismo trance en cualquier juzgado de guardia.
Como era de esperar, y dado el talante conservador del magistrado López, la noticia ha sido motivo de honda satisfacción entre las huestes progresistas, las mismas que vetaron una y otra vez su entrada en el Tribunal. También, cómo no, en aquellos que buscan un castigo ejemplar, más todavía, para este tipo de delitos, exigiendo de manera constante mayores penas para la embriaguez al volante y la conducción temeraria. Los mismos que desde los púlpitos televisivos ya buscan condicionar el juicio de López advirtiendo de las consecuencias, en lo referente a su carrera, que para éste tendría una pena de prisión. Personalmente, porque no me gusta hacer leña del árbol caído y porque sé como se cierran estos asuntos en infinidad de ocasiones, prefiero que la defensa y el fiscal pacten para el ropón una pena de trabajos en beneficio de la comunidad: cien días recorriendo las plazas de España para explicar al respetable que la Justicia emana del pueblo y es independiente del poder político.
8 comentarios:
el magistrado podría alegar que no estaba de servicio cuando el pimple y que él en su tiempo de ocio le da al jack daniels como santi vidal elabora constituciones catalanistas... por si cuela... que aprenda para otra vez, si se toma unas copas de más que otro conduzca la moto, que vaya de paquete atrás o viaje en el sidecar...
2 dimisiones en una semana, prueba de como el sistema se derrumba.
Eso si, en un caso por edad, en otro por darle al trinque; jamás por prostituir el sistema.
Don Reinhard, por favor. No me diga usted que a esta gente, que es la que mayor ejemplo tendría que dar de respeto a las leyes que ellos mismos elaboran, o contribuyen a ello, encima se les va a tener que premiar.
Como al ínclito MAR con el mantenimiento de puestos de tertuliano televisivo.
Un poquito de por favor.
Y en estas mismísimas fechas, a esta otra prócer perteneciente, cómo no, al PP, y para más INRI concejala de Salud, más que dimitir ella le han dimitido.
Lo de los peperos y el alcohol al volante da ya para una tesis doctoral. Mamar en Tiempos Revueltos.
Don Aitor, una pena de prisión, que sería ridícula, nunca sería cumplida, además de que podría ser indultado. Considero más duro esa pena de trabajos para que la peña eche unas risas en cualquier plaza pública con el choteo de la justicia.
Eso sí me parece bien., no le había entendido a usted correctamente. Yo incluso les metía en un reality televisivo, sin sueldo, of course.
La noticia del día : en las últimas 36 horas no ha sido pillado ningún cargo del PP o próximo a él conduciendo borracho.
Laus Deo. Aleluya.
Ojo, Don Aitor, que llega el finde.
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