Yo, que nunca he podido sufrir con paciencia esto de que un hombre pegue a otro impunemente, porque por algo soy español, y que lo que más odiaba de la Rusia zarista era la facilidad con la que los de arriba pegaban a los de abajo, no me explicaba cómo después de haber hecho una revolución para acabar con el látigo de los oficiales y los aristócratas aquel japonés, hijo de mala madre, cruzaba la cara con su fusta a los pobres del mercado de Kiev en nombre del comunismo. Pero, como ya he dicho, yo las cosas de la política no las entiendo.
El párrafo anterior pertenece al capítulo El japonés Masakita, malabarista y verdugo de El maestro Juan Martínez que estaba allí, Libros del Asteroide, 2.007. Afirma un rotundo Andrés Trapiello que Manuel Chaves Nogales es el mejor periodista español junto con Larra, y quizá sea cierto y por bueno se da ese juicio, pero si alguien lo pone en duda no podrá negar que al menos estamos ante uno de los grandes, de la talla de los Camba, Pla, Ruano, Foxá... A caballo entre la novela y el reportaje, entre la realidad y la ficción, El maestro Juan Martínez... es un relato fascinante de la Revolución Rusa a través del testimonio de un bailarín flamenco que junto a su mujer se ve sorprendido por el estallido de unos acontecimientos que cambiaron la historia. Si algo bueno tiene el libro es la clarividencia de su autor-que había conocido la nueva Rusia de los soviets-al denunciar la farsa comunista en un momento en el que casi todos los intelectuales glosaban las conquistas del hombre nuevo, sin haberlas visto y, lo que es peor, sin saber que jamás las verían.
4 comentarios:
El comunismo ha instaurado una nueva humanidad, un hombre nuevo... y para muestra un botón, ahí tenemos a Kim Jong Il que, según la veracísima propaganda del régimen norcoreano, ha escrito 10.000 libros y ha desarrollado un pienso especial para alimentar pollos, super-pollos al servicio proteínico de la nueva humanidad... mientras su seleccionador de fútbol a pico y pala en una cantera...
El libro parece interesante, de modo que lo leeré en cuanto tengamos ocasión.
Comparto que Chaves Nogales hizo un periodismo que ha envejecido muy bien e incluso se le admite cierta clarividencia, aunque en lo tocante a la Guerra Civil española no se le puede considerar imparcial, como hay quien pretende.
Aun más que el Maestro Juan Martínez me divirtió el Belmonte: es otra aventura.
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Que el periodismo de Chaves ha envejecido bien queda demostrado echando un vistazo hoy a cualquier diario.
Es evidente que no era imparcial en lo tocante a la guerra civil, aunque se alejaba mucho de la beligerancia de otros escritores que han resultado mucho más, e injustamente, laureados.
El hombre nuevo, Tolerancio, acabó poblando el Gulag y nunca más se supo.
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