Florentino es un iluso: por fortuna el fútbol no es como los negocios ni como la política, suponiendo que entre unos y otra, al menos en el ámbito de este individuo, exista alguna diferencia. Me quedo con las caras de ese palco, qué fotografía de una Roma decadente a la espera de los bárbaros: Florentino, Rojo, Conde Pumpido, Aguirre.....y Laporta.
A mi Florentino me decepcionó mucho cuando echó a del Bosque para iniciar la contratación de entrenadores metrosexuales. Me pareció un disparate antieconómico.
Tampoco me pareció tal la "salvación" que hizo del Real Madrid, vendiendo los terrenos que había comprado otro. Al final va a ser que no es un ser tan superior como puede parecer en una primera impresión.
No le gustaba del Bosque porque gastaba chándal, así fue. Cuando se marchó la primera vez, hace cuatro años, lo que hizo fue huir: nunca debería haber vuelto. Su gran problema es la prepotencia y considerar que el Madrid es como su empresa, donde los apoyos políticos y la contratación de los mejores gestores te garantiza el éxito.
4 comentarios:
Dime niñooo, ¿de quien erees?, todo vestiditito de blancooo.
Soy del Real Madriid, y otro año me quedo en blancoo.
Soy del Real Madriid, y Florentino se ha ido al Bancoo.
Florentino es un iluso: por fortuna el fútbol no es como los negocios ni como la política, suponiendo que entre unos y otra, al menos en el ámbito de este individuo, exista alguna diferencia.
Me quedo con las caras de ese palco, qué fotografía de una Roma decadente a la espera de los bárbaros: Florentino, Rojo, Conde Pumpido, Aguirre.....y Laporta.
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A mi Florentino me decepcionó mucho cuando echó a del Bosque para iniciar la contratación de entrenadores metrosexuales. Me pareció un disparate antieconómico.
Tampoco me pareció tal la "salvación" que hizo del Real Madrid, vendiendo los terrenos que había comprado otro. Al final va a ser que no es un ser tan superior como puede parecer en una primera impresión.
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No le gustaba del Bosque porque gastaba chándal, así fue.
Cuando se marchó la primera vez, hace cuatro años, lo que hizo fue huir: nunca debería haber vuelto. Su gran problema es la prepotencia y considerar que el Madrid es como su empresa, donde los apoyos políticos y la contratación de los mejores gestores te garantiza el éxito.
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