Brindis al sol

El partido popular, o partido por el poder, ha decidido hacer un brindis al sol a cuenta de la cadena perpetua-revisable, por supuesto-para determinados delitos, y lo hace a remolque de esos casos sangrantes que tanto cuartel dan a los medios como quebraderos de cabeza a los padres de la patria. Suponiendo que cumplan la amenaza y no sea otra de sus habituales bufonadas, la propuesta caerá en saco roto y será rechazada por el resto de grupos políticos, muy ortodoxos en una determinada concepción del derecho penal, aunque se acompañen al efecto cuantos dictámenes y estudios se paguen y acrediten que la medida-asesores tengo- no es inconstitucional, aunque poco importa ya que una ley se ajuste o no a la norma suprema. También amenazan los populares, o populistas, con someter a debate la modificación de la ley del menor, mas no lo harán en lo sustancial, aquello que ellos mismos y en un alarde de progresía se cepillaron cuando gobernaban, y que no sería mayor hazaña que volver a poner las cosas en su sitio, ahora que todo son saldos con lo del aborto, rebajando la mayoría de edad penal a los dieciséis años. Mariano, como es costumbre, brinda al sol la faena y espera la salida a hombros mientras piensa en otras innovadoras propuestas sobre extranjería, educación y lenguas varias, que asesores tengo y es lo que aconsejan, y el despido libre otro día, que es muy complicado y pocos réditos ofrece.