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jueves, 30 de abril de 2015

Sumisión



Pasó el misántropo Houllebecq por Barcelona para presentar su última obra de política-ficción, o quizá no tan ficticia, pues no sería nada extraño ver un presidente musulmán en la Francia del año 2022, sobre todo si es mediante una alianza de todos los partidos morigerados contra el Frente Nacional. La novela, asociada al malditismo del autor, llegó a las librería francesas el mismo día que unos islamistas arrasaban la redacción de Charlie Hebdo, y aquí la tenemos ya, presentada entre grandes medidas de seguridad, lo que sin duda anima el decadente ambiente de la ciudad. Como es tradición en el padre de la criatura, esta sátira implacable no dejará títere con cabeza ni indiferente a nadie: si es profética, el tiempo, cómo no, lo dirá, pero no parece un disparate el escenario que plantea.

7 comentarios:

Señor Ogro. dijo...

La historia demuestra que lo que creemos imposible, es muy posible o que haya pasado ya, o que esté pasando en este momento.

El ser humano se caracteriza por tender a negar las evidencias racionales cuando estas atentan a su "comodidad"

Y esa tendencia, en nuestras socialdemocracias repletas de papanatas, biempensantes y pensamiento alicia, alcanza cotas religiosas

Aitor Mento dijo...

Parece interesante el libro cuando menos. Tomo nota.

Fuga dijo...

‘nuestros soldados son los vientres de nuestras mujeres’ que dijo uno de ellos.

Así que los votos llegarán, posiblemente.

Yo espero sacar algún beneficio práctico del ocaso de occidente…casarme con 4 0 5 tías que estén muy buenas y que los impuestos caigan sobre los cristianos, que para eso serán los paganos.

Cerdo y vino serán el nuevo placer de lo prohibido.

Reinhard dijo...

Lo mejor de esa ficción es que ante la disyuntiva FN o un musulmán se optaría por el moro. Sin duda, la decadencia de Occidente.

Traveller dijo...

Y que tal un moro del FN y la liamos del todo?

fuga dijo...

haberlos haylos...
:)

tolerancio dijo...


no tiene mala pinta la novela...