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sábado, 18 de diciembre de 2010

Estajanovismo


En una vibrante intervención ante el comité central, el camarada Pepiño Blanco anuncia la hazaña de un controlador aéreo que fue capaz de hacer 1.200 horas extraordinarias en un solo año.

4 comentarios:

tolerancio dijo...

El cómputo de horas extra lo llevaba el CNI, que había pinchado los móviles y colocado cámaras en los baños de la torre de control para pillarles in fraganti fumando un pitillo...

... esto es un no parar...

Reinhard dijo...

Cada vez siento más y mayor simpatía por este colectivo de controladores: que alguien me diga, con sólidos argumentos, que no es para quitarse el sombrero un tipo que hace esa cantidad de horas extras, al margen las normales, y se levanta un millón de euros. Genial.

Yeager dijo...

Muy buenas, Don Reinhard.
A mi se me ocurren tres posibilidades:
1.- Que AENA (y, en última instancia Pepiño) pagara las horas extra sin mirar si se trabajaban o no. Mal para AENA, y muy listo el tío que se ha aprovechado de la gilipollez de sus jefes.
2.- Que AENA (e, igual que antes, Pepiño) lo supiera, pero le importara un bledo el asunto. Idem que el anterior.
3 (y más probable).- Que sea una patraña (otra más) del dúo Pepiño-Fredo.
Al final, igual que le ocurre a usted, yo también siento cada vez una mayor simpatía por dicho colectivo.

Reinhard dijo...

Don Yeager, no creo que sea un farol: eran los tiempos de bonanza y aquí se tiraba el dinero a la basura. Voy a fundar un club de fans de estos controladores. Fijo.