TWITTER

lunes, 24 de noviembre de 2025

Recomendaciones

 


Vuelve Lorenzo Ramírez, tras su libro sobre las mentiras del 11-M, con un interesante y bien documentado ensayo sobre los agentes del caos que gobiernan el mundo. Las falacias sobre la guerra de Ucrania, el experimento colosal que fue la pandemia del Covid y las inevitables vacunas como efecto colateral, amén la martingala estupefaciente sobre el cambio climático, pasando, cómo no, por el hundimiento de una decadente Europa en beneficio de la élites extractivas que saquean nuestros bolsillos, entre otras apasionantes cuestiones geopolíticas que a nadie dejan indiferente.



Soto Ivars, so pena de ser cancelado por negacionista, algo que ya se ha intentado desde los ambientes wokes que maman del presupuesto público, se lanza por la peligrosa pendiente de la mal llamada violencia de género y la múltiples denuncias falsas que se formulan contra hombres de la más variada condición. Ya sabemos, el foro así lo acredita, que son pocas las mujeres condenadas por acusación y denuncia falsa, pero también es notorio que esos delitos son difíciles de probar, máxime cuando jueces y fiscales tampoco están por la labor y prefieren mirar para otro lado con el socorrido sobreseimiento provisional, ni siquiera el libre y definitivo, que sería lo propio para tranquilidad de tantos inocentes.

Un par de libros interesantes a los que hay que asomarse con la debida y lógica alegría en tiempos de infinita zozobra.


jueves, 20 de noviembre de 2025

50 años no son nada

 


50 años de la muerte del Invicto, pero hoy nos encontraremos con los tópicos de cada aniversario: que si era el fin de una feroz dictadura, que si el óbito dio paso al feliz y próspero reinado del Emérito, que si en ese momento arribó  la llegada de una democracia que tanto esfuerzo y sacrificio costó a los españoles...Pero 50 años no son nada, y así conviene huir de los diagnósticos que facturen los apologetas del Régimen y recordar cómo era aquella España de 1975.

Queden aquí unas cuantas pinceladas, pocas, para el recuerdo y la melancolía: una clase media que poco tenía que envidiar a la de la Europa desarrollada, un acceso fácil-ya fuese mediante compra o alquiler-a la vivienda, un modelo educativo con una enseñanza pública, unida a la privada o concertada, de notable calidad que permitía el funcionamiento de un ascensor social prodigioso, un sistema sanitario universal y gratuito dotado de potentes medios materiales y humanos y, poca broma, una deuda pública ridícula.

50 años no son nada, especialmente si se goza de buena memoria, objetividad y apego por los datos. Todo lo demás es música de tertulianos.  


viernes, 14 de noviembre de 2025

Los señoritos

 


Hay algo en Díaz Ayuso que repele más allá de cualquier consideración política, algo que es superior al siempre poco edificante juego político y que recuerda mucho al estólido Ánsar. No satisfecha, gracias al contribuyente, con haber montado un colosal negocio a costa de los menas, defiende una inmigración masiva desde el más rancio clasismo. Para arremeter contra VOX resume el concepto que tiene la señora, o señorita, sobre las tareas que deben desempeñar aquellos que vengan en busca del sueño español: labores domésticas, recoger frutas y verduras y construir pisos. Sorprende que dejase en el tintero la hostelería, motor de la economía española hasta el petardazo que pegó el ladrillo hace años. Hay que tener mucha imaginación para creer que todos esos elementos que llegan en patera se van a poner a trabajar en el campo o sacar de paseo a un octogenario.

Y esta mujer es la gran esperanza del centro centrado muy moderado que no logra poner contra las cuerdas al camarada Sánchez y que si algún día quiere gobernar tendrá que pactar con los señoritos de VOX. En el ínterin, vaya la señora, o señorita, presidenta construyendo centros de menas y alimentado la realidad paralela en la que está instalada. Al fin y al cabo, la responsabilidad no cotiza en política.