De las catástrofes siempre queda la nostalgia por las naderías de la víspera
sábado, 18 de febrero de 2012
Imaginario
Así como aquel Frente Popular fue una gran marea democrática, de una guisa parecida nos cuenta Artur Mas que Cataluña ha perdido más de una guerra contra España. Ponga un nacionalista en su vida, goce de la auténtica literatura.
La estupidez nazicatalanista, siempre tan enboga. Cataluña no ha podido perder ninguna guerra contra España porque Cataluña es, más que le pese, esa misma España. Siguen con sus historias de independentismos mientras caen por el pozo. Cada vez me recuerdan más a los músicosdel Titanic, ya que siguen soltando soflamas mientras la nave se hunde.
El imaginario nacionalista es así. ESTO es el nacionalismo puro: la invención, el atropello del relato histórico, el victimismo sustentado en la nada sideral.
Y esto pasa, porque nadie sale en ese mismo medio, poniendo en su sitio a estos orates, y contando la historia real.
Es obsceno que la mentira prolifere sin que nadie de un puño en la mesa.
El problema ya no es que se cuente ciertas cosas que pueden ser idioteces, e incluso estafas, sino que estas leyendas de mierda se lleven, como está ocurriendo, a los libros de texto, de tal forma que los niños ya crecen con un serio handicap.
Aunque lo más grave es que todo esto se acabe considerando como una boutade más del nacionalismo sin que nadie diga una palabra más alta que otra.
Los músicos del Titanic, utilizando la comparación de don CS Peinado, no sólo tocan sardanas. También música con raíces de otros 16 territorios y alegres tonadas de la UNICEJ, incluyendo el nuevo éxito We are Garzón, we are the children.
Hasta melodías pop para el Partido Ídem, como dijo un tal Basagoiti.
La estupidez nazicatalanista, siempre tan enboga. Cataluña no ha podido perder ninguna guerra contra España porque Cataluña es, más que le pese, esa misma España. Siguen con sus historias de independentismos mientras caen por el pozo. Cada vez me recuerdan más a los músicosdel Titanic, ya que siguen soltando soflamas mientras la nave se hunde.
ResponderEliminarAnimalicos...
Un saludazo, Reinhard.
El imaginario nacionalista es así. ESTO es el nacionalismo puro: la invención, el atropello del relato histórico, el victimismo sustentado en la nada sideral.
ResponderEliminarY esto pasa, porque nadie sale en ese mismo medio, poniendo en su sitio a estos orates, y contando la historia real.
Es obsceno que la mentira prolifere sin que nadie de un puño en la mesa.
El problema ya no es que se cuente ciertas cosas que pueden ser idioteces, e incluso estafas, sino que estas leyendas de mierda se lleven, como está ocurriendo, a los libros de texto, de tal forma que los niños ya crecen con un serio handicap.
ResponderEliminarAunque lo más grave es que todo esto se acabe considerando como una boutade más del nacionalismo sin que nadie diga una palabra más alta que otra.
Los músicos del Titanic, utilizando la comparación de don CS Peinado, no sólo tocan sardanas. También música con raíces de otros 16 territorios y alegres tonadas de la UNICEJ, incluyendo el nuevo éxito We are Garzón, we are the children.
ResponderEliminarHasta melodías pop para el Partido Ídem, como dijo un tal Basagoiti.
Un abrazo, mucho más fuerte ahora si cabe.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarP.S.: La versión más novedosa del susodicho éxito.
ResponderEliminarGracias, Don Aitor.
ResponderEliminarImpresionante documento; como dicen ellos, hasta cuándo...habrá que aguantar esta melodía.
Cierto, don Reinhard.
ResponderEliminarY hay que ver qué voces pueden llegar a sumarse a las habituales de la UNICEJ.
Arturo Mas I de Liechtenstein traspasó hace tiempo la línea roja de la estupidez... y no hay retorno posible.
ResponderEliminarLa última guerra perdida: la final de la copa del Rey de baloncesto... ¡Y en casa!